En esta nueva entrada del blog os queremos hablar sobre la importancia que tiene el control de stock. Especialmente en aquellas empresas cuya actividad requiera de realizar grandes compras y gestionar muchas existencias.
¿En qué consiste el control de stock?
El control de stock en la empresa es el proceso mediante el cual se realiza un balance de las compras y ventas, con el objetivo de conocer los productos disponibles. Es decir, la gestión del stock permite organizar las existencias manteniendo en la empresa un stock óptimo que ofrezca la máxima rentabilidad y aumente la competitividad de la compañía.
La función primordial del control del stock es evitar la escasez del producto con el que se trabaja y así poder satisfacer las demandas de compra de los clientes. De este modo, podremos aumentar las ventas, teniendo siempre en cuenta que cualquier desequilibrio en la gestión del stock resta competitividad a la empresa. Por otro lado, una buena gestión del stock lleva a minimizar los costes que tiene que soportar la empresa. En resumen, es necesario disponer de stock suficiente a fin de llevar a cabo nuestra actividad, pero nunca tener un excedente que afecte negativamente a nuestra tesorería.
Clasificación de los costes generados por el stock
Los principales costes que se derivan del stock son de:
- Coste adquisición: es el precio de la mercancía.
- Coste de pedido: engloba los costes administrativos de realizar un pedido.
- Coste de mantenimiento: son aquellos relacionados con el personal, costes de almacenaje y gestión del almacén y depreciación de existencias.
- Coste de rotura de stock: son los ingresos no generados por no poder afrontar un pedido.
Un aspecto importante de la empresa en la gestión del stock es identificar la función de la cantidad de stock con la que cuenta. Definimos stock mínimo como la cantidad mínima de existencias que debe tener en el almacén; y stock máximo como el nivel máximo que la empresa puede acumular de mercancías. Debemos tener en cuenta que el stock supone un coste de almacenamiento. Si las existencias son demasiado abundantes o escasas, pueden suponer pérdidas en la empresa. Por otro lado, un stock de seguridad permite hacer frente a aumentos de demanda imprevistos y evitar riesgos de ruptura en la cadena de producción.
Modelos existentes de gestión de stocks
Diferentes modelos de gestión de stock son:
- Just inTime: es un modelo que delimita las existencias necesarias para cada momento de producción, permite ahorrar en costes de almacenamiento. Además, puede suponer una dificultad al hacer frente a situaciones extraordinarias de demanda.
- Método FIFO (First In, First Out): este sistema consiste en dar salida a las existencias que más tiempo permanecen en el almacén, permitiendo una rotación óptima del stock.
- Wilson: es un modelo que tiene en cuenta la cantidad del pedido que se realiza para minimizar los costes de pedido y tardar más tiempo en volver a realizarlo, pero teniendo en cuenta los costes de almacenaje para realizar un pedido de gran cantidad.
- ABC: este modelo clasifica los productos en tres categorías:
- A: son los productos de mayor valor en la empresa y que requieren de un control más periódico, puesto que son los que más rotan en el inventario.
- B: son las mercancías cuyo valor no es elevado y requieren de un menor control por parte de la empresa, dado que rotan menos.
- C: son las existencias de menor valor y aquellas que menos rotan dentro del inventario, por tanto, su gestión es las más sencilla.
Conclusión
En definitiva, tras este artículo se concluye que el correcto control de la gestión de stock e inventarios siempre tendrá un impacto positivo en la cuenta de resultados, minimizando costes de administración y permitiendo aumentar las ventas. con una mejor respuesta hacia los clientes.